jueves, 21 de noviembre de 2013

El humo del cigarrillo.

No hay palabra exacta que nos venga bien, que nos defina cada detalle de 'aquello' que deseamos olvidar acompañandolo de sonrisas amargas y gestos bien actuados para disimular ante los demás. ¿Que que paso? No se, tal vez el humo de lo que fue, ha logrado que mi cabeza convenza al corazón de echar los restos del recuerdo por el vacío.
Eramos combinación peligrosa, delicada e inesperada, yo fui tu problema y tu te convertiste en mi mal, un mal que me hacia sentirme tan débil y me hacia perderme en esa mirada, un mal que no tiene remedio ni medicina, simplemente tiempo..

Nos perdíamos en las miradas, mirarnos de lejos, tu deporte favorito, dejando que ganara el silencio que enclaustraba tus palabras y hacia que las miradas se convirtieran en nuestro juego secreto.

Vicios sin mostrar, tu eras uno de los mios, no se si yo fui uno de los tuyos, ¿Eso importa ahora? No, pero mientras tanto, terminate el cigarrillo, te acompañare con el siguiente, mientras el humo del cigarrillo nos vuelve a nublar la vista...

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