martes, 31 de marzo de 2015

Temporal.

De hecho, si estás dispuesto, en este mundo hay muy pocas cosas que no puedas dejar. No, tal vez no haya ninguna. Y, puestos a dejar cosas atrás, acabas queriéndolo dejar absolutamente todo.

Descubrir que el cielo era eso que estaba en tu interior. Pero ya no está.

lunes, 16 de marzo de 2015

Puentes.

Lo había estado esperando. Ahora lo comprendía completamente. Este momento, aquí, ahora, con el cielo a sus pies y millones de estrellas en su mirada.
Como si todas las historias, las personas que han habido antes, eran una especie de puentes. Puentes frágiles que me permitían acercarme cada vez mas a este instante, y que habían que romperse en cuanto los hubiera cruzado.

Y aprendí que nunca se está listo para lo que se tiene que hacer. Sólo lo haces.
Y que el amor no duele, cariño. El amor cura.

martes, 10 de marzo de 2015

Razones.

Creo que uno nunca se percata del verdadero amor hasta que éste nos quema.

Creo que uno nunca sabe lo que tiene hasta que lo ve perdido.

Y tu, y tu... "No te rindas con la gente que quieres". Es algo que me enseñaste.

domingo, 8 de marzo de 2015

En mayusculas.

Si bien es cierto que perdemos muchas batallas, también las batallas nos pierden de vez en cuando. Y así como perdiste a alguien hace muchos años, ahora alguien te esta perdiendo. Porque no supo ver que ibas a su lado, que lograste vencer tus miedos para hacer las cosas bien por primera vez en tu vida. El hecho de ver como se rinde te está haciendo crecer, pero duele. Siempre duele.
Tal vez no consigas lo que esperabas, pero tal vez esa sea la única manera.

martes, 3 de marzo de 2015

Incandescente.

Tu presencia cruza calles, semáforos en rojo. Te siento: tres pasos, dos pasos, uno. Ya estas aquí.

domingo, 1 de marzo de 2015

Destinos.

Y vago, dando vueltas con mis instrumentos y mis cuadernos, sin hallar el principio de lo que busco, la entrada a una respuesta cualquiera. ¿Dónde empieza el final del mar? ¿Nos referimos al inmenso monstruo capaz de devorar cualquier cosa o a esa ola que espuma en torno a nuestros pies? ¿Al agua que te cabe en el cuenco de la mano o al abismo que nadie puede ver? ¿Lo decimos todo con una sola palabra o con una sola palabra lo ocultamos todo? Estoy aquí, a un paso del mar, y ni siquiera soy capaz de comprender dónde está él. 
El mar. El mar.

Fragmento final de uno de los grandes de mi vida, Océano Mar, de Alessandro Barroco.